El mundo automotriz siempre ha estado en constante cambio e innovación, lo cual nos beneficia a todos, pero en especial a las empresas que ya no solo buscan rendimiento y ahorro, sino también eficiencia energética y compromiso ambiental.
Debido a tantos cambios, surge una gran pregunta, ¿qué es mejor para mi empresa? Elegir la opción correcta puede ayudarte a optimizar costos, mejorar tu imagen empresarial y hacer más eficiente la operación de tu flotilla.
Los vehículos eléctricos funcionan gracias a un motor alimentado por electricidad, almacenada en baterías recargables. A diferencia de los vehículos tradicionales, no utilizan gasolina ni diésel y no generan emisiones contaminantes durante su uso. Son más silenciosos, requieren menos mantenimiento y pueden cargarse en casa o en estaciones especializadas.
Los vehículos de combustión llevan más de un siglo en el mercado y actualmente son la opción más común y tradicional, funcionan mediante la quema de combustible (gasolina o diésel) generando energía pero también emisiones contaminantes.
Sigue leyendo y descubre todo lo que debes saber sobre vehículos eléctricos y vehículos de combustión, sus diferencias y que opción es la más rentable, eficiente y sostenible para tu negocio.
Vehículos eléctricos
Ventajas:
- Cero emisiones contaminantes al circular.
- Ahorro en combustible (la electricidad es más barata que la gasolina).
- Menor costo de mantenimiento.
- Incentivos fiscales y beneficios gubernamentales (como deducción de impuestos, evitar la tenencia, obtener mejores créditos y circular sin restricciones).
- Ideal para empresas comprometidas con la sostenibilidad.
Desventajas:
- Mayor precio de adquisición (aunque se compensa con el tiempo).
- Autonomía limitada (aunque ha mejorado mucho).
- Dependencia de estaciones de carga o cargador en casa.
Vehículos de combustión
Ventajas:
- Costos iniciales más bajos.
- Mayor autonomía por tanque de combustible.
- Amplia disponibilidad de estaciones de carga (gasolineras).
Desventajas:
- Altas emisiones contaminantes.
- Dependencia de los precios del petróleo.
- Mayores gastos a largo plazo en mantenimiento y combustible.
- Menos alineados con las nuevas políticas ambientales.
Como podemos ver, los vehículos eléctricos tienen un costo inicial más alto, pero ofrecen menores gastos gracias al bajo costo de la electricidad y su mantenimiento reducido. Además, no generan emisiones, lo que los hace ideales para empresas con enfoque sustentable. Por otro lado, los vehículos de combustión son más accesibles al inicio y tienen mayor autonomía, pero requieren más mantenimiento y producen contaminación.
Otro de los puntos a tomar en cuenta es que las gasolineras están disponibles en todo el país, las estaciones de carga para eléctricos aún están en desarrollo. Es muy importante tener en cuenta estas características para tomar la decisión que se adecue más a ti y tu empresa.
¿Cómo impacta esta elección en tu empresa?
Los vehículos eléctricos ayudan a reducir la huella de carbono, mejoran la percepción pública de tu empresa, reducen los costos operativos y te preparan para las regulaciones y cambios futuros. Mientras que los vehículos de combustión pueden ser más fáciles de incorporar si tu empresa opera en zonas con poca infraestructura eléctrica, pero implican más costos operativos y menos alineación con las tendencias ecológicas.
Entonces ¿Qué es mejor para mi empresa?
Todo depende de tu modelo de negocio, rutas, presupuesto y metas a mediano y largo plazo por lo que puedes hacerte estas preguntas, para tener una visión más clara de qué tipo de vehiculo buscas y se adapta mejor a tus necesidades:
- ¿Cuál es mi presupuesto inicial y operativo?
- ¿Mi empresa está alineada con temas de sostenibilidad?
- ¿Cuánto recorre mi flotilla al día?
- ¿Hay infraestructura de carga cerca de mis operaciones?
- ¿Quiero una imagen moderna y responsable para mi negocio?
Si buscas eficiencia, ahorro y sostenibilidad, los vehículos eléctricos te dan una gran ventaja. Si prefieres la autonomía, bajo costo inicial o movilidad en zonas alejadas, los vehículos de combustión son lo que buscas.
Esta decisión impacta a tu operación, tus costos y tu imagen corporativa. Elegir bien no solo mejora tu movilidad, también mejora cómo te perciben clientes, socios e inversionistas.
Es importante que pienses a largo plazo y tomes en cuenta que esta industria ha evolucionado de forma rápida y lo seguirá haciendo, cada vez más gobiernos y empresas están prefiriendo vehículos eléctricos debido a que la tecnología avanza rápidamente con mejores baterías, más autonomía, más estaciones de carga, etc. Adaptarse a esta transición puede darte una gran ventaja competitiva.
En Neo Leasing, te ayudamos a tomar la mejor decisión con un análisis personalizado y soluciones de leasing flexibles para ambos tipos de vehículos; recuerda que gracias al leasing, puedes cambiar o actualizar tu flotilla incorporando nuevas tecnologías sin comprometer tu capital y sin comprar los vehículos.
Si te gustó este artículo visita nuestro blog, infórmate más sobre esta industria y descubre algunos consejos, noticias y tendencias.
